SpaceX compartió nuevas imágenes de la Starship en su décimo vuelo de prueba, donde logró completar la reentrada y un amerizaje controlado en el océano, a pesar de los daños visibles en el vehículo.
El material difundido por SpaceX muestra a la nave en el momento de su amerizaje en el océano Índico, con un tono anaranjado tras sobrevivir a una reentrada especialmente exigente.
Una prueba clave
El décimo vuelo de prueba partió el 26 de agosto desde Starbase, en Texas, y despegó sin problemas gracias a los 33 motores del Super Heavy. La separación de etapas fue exitosa y el propulsor logró amerizar en el océano, cumpliendo su función antes de que la Starship continuara su viaje hacia el espacio.
Los hitos en el espacio
Una vez separada del propulsor, la Starship realizó una combustión completa que la posicionó en su trayectoria suborbital, permitiendo validar varias pruebas clave. Destacaron el despliegue de ocho simuladores de satélites Starlink y el segundo reencendido en la historia de un motor Raptor en el espacio, considerados esenciales para futuras misiones.
El desafío de la reentrada
La reentrada fue el punto más crítico de la misión. SpaceX había tenido varios intentos fallidos, lo que generó dudas sobre la capacidad del vehículo para sobrevivir a esta fase. En esta ocasión, la nave enfrentó condiciones extremas.
El mensaje de SpaceX
Recientemente, SpaceX publicó un mensaje que resumía los logros alcanzados: “Starship superó la reentrada con losetas faltantes de forma intencionada, completó maniobras para forzar sus flaps, sufrió daños visibles en el faldón trasero y los flaps, y aun así ejecutó un giro y un encendido de aterrizaje”. A pesar de las adversidades, la nave mantuvo la maniobrabilidad necesaria para dirigirse con precisión hacia su zona de amerizaje en el Índico.
La imagen difundida junto al comunicado muestra a la Starship con un aspecto desgastado y un tono cobrizo, lo que llevó a especulaciones sobre el motivo de este cambio.
Un cierre milimétrico
Para SpaceX, el valor del vuelo radica en el aprendizaje obtenido durante la prueba. Cada dato recopilado en condiciones extremas acerca a la compañía a su objetivo de desarrollar un lanzador de gran tamaño totalmente reutilizable, clave para el regreso de la humanidad a la Luna con Artemis y futuras misiones a Marte.
Fuente original: ver aquí