El nuevo documental de Netflix, Cuerpos de TV: La realidad de ‘The Biggest Loser’, ha generado gran repercusión desde su estreno. En uno de sus capítulos, se revela que una concursante estuvo a punto de morir debido a un fallo orgánico durante el rodaje del programa de adelgazamiento, lo que desató indignación y debates sobre los riesgos y la presión a la que son sometidos los participantes.
The Biggest Loser se estrenó en NBC en 2004 y se mantuvo al aire durante 18 temporadas hasta 2016, con un breve regreso en 2020 a través de la cadena USA Network. El programa reunía a personas con obesidad que competían para perder la mayor cantidad de peso posible, siguiendo estrictas rutinas de ejercicio y dietas, con la promesa de un premio de 250.000 dólares para el ganador.
Durante su auge, se convirtió en un fenómeno televisivo global, con adaptaciones en varios países y millones de espectadores en Estados Unidos. Sin embargo, con el tiempo empezaron a surgir denuncias sobre los métodos utilizados detrás de cámaras.
Este documental, compuesto por tres episodios, incluye entrevistas con antiguos concursantes, entrenadores y productores del reality show, quienes relatan lo que ocurría tras bambalinas y cómo se desarrollaba realmente el programa. Uno de los momentos más impactantes fue cuando una concursante compartió su experiencia cercana a la muerte, revelando los extremos a los que llegaron durante la competencia.
Tracey Yukich, concursante de la octava temporada de The Biggest Loser, recordó que al inicio de su participación enfrentó un reto que consistía en correr un kilómetro y medio en la playa antes de comenzar su entrenamiento. Tras esforzarse al máximo, se desplomó y los médicos tuvieron que socorrerla rápidamente, incluso llegaron a declarar que no respondía.
“Recuerdo haber oído el helicóptero. Me sentí como si estuviera flotando. Y entonces mi abuelo estaba allí. Y vi oscuridad. Pero luego vi la luz. Así que lo supe, supe que morí ese día”, relató Yukich, describiendo su experiencia cercana a la muerte. Inicialmente se pensó que se trataba de un golpe de calor, pero luego se descubrió que había desarrollado rabdomiólisis, una lesión muscular poco frecuente que provoca la descomposición de los músculos del cuerpo.
“Mis órganos estaban literalmente colapsados”, explicó Yukich. “No me di cuenta de que tenía rabdomiólisis. Y la rabdomiólisis es la forma que tiene tu cuerpo de decir: ‘Me voy a apagar’. Empezó en el hígado, luego en los riñones y finalmente en el corazón. Y ahí es donde casi muero”.
A pesar de que el equipo médico del reality show quería enviarla a casa tras la lesión, Tracey Yukich decidió luchar por continuar en la competencia. Sin embargo, admitió que no seguía las indicaciones de los entrenadores, sino las del asesor médico del programa, el Dr. Robert Huizenga. Finalmente, permaneció en el programa hasta ser eliminada después de ocho semanas.
Su testimonio pone en evidencia los riesgos extremos a los que se ven expuestos los participantes de este tipo de programas, donde la presión y la exigencia física pueden poner en juego la salud e incluso la vida. La revelación ha generado indignación entre quienes siguieron la docuserie y ha abierto un debate más amplio sobre los límites de este tipo de programas de televisión.
Fuente original: ver aquí