El club Independiente de Avellaneda ha sido descalificado de la Copa Sudamericana debido a los graves incidentes ocurridos durante el partido contra Universidad de Chile, que fue suspendido. La decisión fue tomada por la Conmebol tras evaluar los hechos de violencia que se desataron el 20 de agosto en el estadio Libertadores de América.
La Conmebol impuso una serie de sanciones, incluyendo la obligación de Independiente de jugar a puerta cerrada los próximos siete partidos como local y otros siete como visitante, además de una multa de 150.000 dólares y otra de 100.000 dólares por infracciones al código disciplinario.
La descalificación se produjo después de una audiencia en la sede de la Conmebol en Paraguay, donde representantes de ambos clubes expusieron sus argumentos. La violencia resultó en 111 detenidos y 19 heridos, uno de ellos de gravedad.
Universidad de Chile avanzó a la siguiente ronda del torneo y se enfrentará a Alianza Lima, mientras que el club chileno también deberá jugar a puerta cerrada y pagar multas que suman 270.000 dólares.
El presidente de Independiente, Néstor Grindetti, anunció que apelarán la decisión ante la Comisión de Apelaciones de la Conmebol, argumentando que la responsabilidad de los incidentes recae en los hinchas visitantes.
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