Un antiguo mundo tropical ha sido descubierto en Mazon Creek, Illinois, a través de un yacimiento fósil que revela la biodiversidad de criaturas que habitaban en pantanos, deltas fluviales y mares poco profundos hace más de 300 millones de años, durante el período Carbonífero. Este reciente estudio de la Universidad de Missouri demostró cómo la preservación en este sitio ha permitido conservar la variedad de organismos que habitaron tanto ambientes terrestres como acuáticos.
Mazon Creek: el yacimiento fósil de Illinois que muestra la biodiversidad del Carbonífero
El equipo del College of Arts and Science de la Universidad de Missouri, en colaboración con el geólogo Gordon Baird, evaluó los fósiles de Mazon Creek, que están almacenados en el Field Museum de Chicago. La colección incluye 300.000 formaciones de siderita, un mineral de carbonato de hierro, recolectadas de 350 localidades.
Los restos de este sitio, ubicado al norte de Illinois, “revelaron una preservación excepcional de plantas y animales, posible gracias a un contexto geológico único”, según detalló la Universidad de Missouri.
La investigación actual ha aportado una visión más detallada de estos hallazgos, gracias a modernas técnicas de análisis de datos y a imágenes avanzadas obtenidas en el Centro de Microanálisis de Rayos X de la universidad.
Qué descubrieron los científicos en el yacimiento fósil de Mazon Creek
El trabajo pionero de Baird realizado hace décadas en Mazon Creek permitió identificar dos grandes conjuntos faunísticos, que ayudaron a los científicos a entender los antiguos ambientes donde se formaron los fósiles. Uno correspondía a un ecosistema marino, mientras que el otro era un grupo mixto del delta fluvial, donde se conservaban animales de agua dulce, plantas y organismos terrestres arrastrados por el río.
Jim Schiffbauer, profesor de ciencias geológicas, detalló: “Identificamos tres paleoambientes claramente distinguibles, incluyendo un conjunto marino bentónico que representa un hábitat de transición entre las zonas costeras y mar adentro. Cada uno de estos ambientes estaba dominado por grupos específicos de animales: de agua dulce cerca de la costa, medusas y anémonas más alejadas, y almejas y gusanos marinos en la zona de transición.”
El estudio ofrece un panorama de la diversidad presente en el Carbonífero tardío y permite inferir la complejidad de las cadenas alimentarias, así como el funcionamiento de este ecosistema. “Ahora contamos con una visión sin precedentes y estadísticamente fundamentada de la vida terrestre, estuarina y marina interconectada del período Carbonífero”, añadió Schiffbauer.
Baird indicó que la información del yacimiento de Mazon Creek conducirá a una comprensión más profunda de depósitos similares en otras cuencas carboníferas. Ambos científicos planean desarrollar un modelo sedimentológico que ilustre cómo el ecosistema de Mazon Creek se relaciona con las capas de carbón de Colchester situadas debajo, donde la actividad minera condujo al hallazgo original del yacimiento fósil.
Fuente original: ver aquí