El Parque Nacional Torres del Paine, en Chile, ofrece una experiencia única durante el invierno, a pesar de que los alojamientos solo operan de octubre a abril. Durante esta temporada, el parque mantiene abiertos sus senderos, permitiendo que los aventureros se adentren en la naturaleza.
Con un paisaje de cumbres nevadas, lagunas congeladas y bosques cubiertos de hielo, el parque se convierte en un destino atractivo para fotógrafos y amantes de la naturaleza. En invierno, recibe menos de mil visitantes, en contraste con los casi 250 mil que lo visitan en verano. Aunque los campings y hoteles están cerrados, senderos como el de la base de las Torres y los circuitos de la O y la W están accesibles para el público.
Trekking Base Torre
La aventura comienza temprano en la mañana, cuando un guía lleva a los visitantes desde Puerto Natales al parque. Durante el trayecto, se habla sobre la geografía y la historia del lugar, mientras se atraviesan paisajes cubiertos de nieve. El trekking a la base de Torres tiene una longitud de 22 kilómetros, con un desnivel positivo de 1,500 metros, y se estima una duración de 8 horas.
El recorrido inicia por la pampa patagónica, donde se pueden observar diversas especies vegetales. A medida que avanza la caminata, los visitantes llegan al Valle de Ascensión, donde el paisaje nevado se vuelve más impresionante. A medida que la neblina y la nieve se intensifican, la dificultad del trekking aumenta, pero también se hace más evidente la vida silvestre del parque.
Después de varias horas de caminata, los excursionistas alcanzan el Mirador Base Torres, donde la vista de los picos de granito y el glaciar es impresionante. El regreso se realiza en su mayoría en descenso, y al final del día, se disfruta de una cena en Puerto Natales.
Safari fotográfico
En otra excursión, un fotógrafo especializado en la región comparte su conocimiento sobre los mejores lugares para capturar imágenes del paisaje invernal. Los visitantes aprenden sobre técnicas de fotografía mientras observan huellas de fauna en la nieve. A lo largo del día, se recorren diversos puntos icónicos del parque, disfrutando de la belleza de la Patagonia.
Pumas en la estepa
En una jornada dedicada a la observación de pumas, los guías llevan a los visitantes a explorar áreas donde es más probable avistar a estos felinos. La nieve facilita la identificación de huellas y permite observar la fauna del parque, incluyendo guanacos, zorros y diversas aves.
El recorrido culmina con el avistamiento de un puma, lo que deja una experiencia memorable para los participantes. Después de un día lleno de aventuras, los visitantes regresan a su alojamiento, satisfechos con su experiencia invernal en el Parque Nacional Torres del Paine.
Datos útiles
- – El parque está abierto los 365 días del año, con horario de 8 a 18 en invierno.
- – El costo de entrada, válida por 3 días, es de 33 mil pesos chilenos (aproximadamente 44 mil pesos argentinos).
- – Es necesario hospedarse en Puerto Natales, ya que no hay transporte público disponible.
- – Se recomienda planificar al menos 5 días para aprovechar el clima favorable.
- – Información sobre prestadores de servicios está disponible en los sitios web de trekking y fotografía.
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