El regreso a la primera división del fútbol de Portugal ha generado un gran impacto. En febrero, Vinicius Junior adquirió el control del FC Alverca, que volvió a la máxima categoría después de 21 años. Para consolidar su retorno, el club ha realizado un número significativo de contrataciones.
Con el objetivo de mantenerse en la primera división, el equipo ha decidido incorporar a 33 futbolistas de 14 nacionalidades diferentes.
Entre las incorporaciones más destacadas se encuentran Sergi Gómez, quien ha jugado en las filiales del Barcelona y en el primer equipo del Espanyol y Sevilla, con el que ganó la Europa League en 2020. También se sumaron Nabil Touaizi, quien comenzó su carrera en el Manchester City, y el serbio Marko Milovanović, llegado desde Almería.
A pesar de estas nuevas adquisiciones, el inicio de la temporada para el FC Alverca no ha sido favorable. En su debut, perdió 2-1 ante Moreirense y en la segunda fecha sufrió una derrota de 3-0 contra Sporting Braga. En la tercera jornada, logró empatar 2-2 ante Estrela Amadora. Recientemente, el equipo enfrentó a Benfica, perdiendo 1-2, con Vinicius presente en las gradas, atrayendo la atención de los aficionados.
Actualmente, el FC Alverca ocupa el 16° lugar en la tabla, en zona de promoción, y se prepara para jugar contra Tondela el próximo viernes, buscando sumar puntos.
El desembarco de Vinicius
El delantero del Real Madrid ha decidido expandir su participación en el fútbol, comprando casi el 80% de la sociedad anónima del FC Alverca. Esta adquisición le permitió convertirse en el propietario más joven de la historia de un club de fútbol, asumiendo la parte que pertenecía a Ricardo Vicintin.
Aunque los detalles financieros del acuerdo no se han hecho públicos, fuentes cercanas indican que la transacción se cerró en torno a los ocho millones de euros.
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