Home / Tecnologia / China desarrolla turbinas eólicas voladoras inspiradas por Qian Xuesen

China desarrolla turbinas eólicas voladoras inspiradas por Qian Xuesen

A mediados del siglo XX, Estados Unidos tomó una decisión que fue calificada como “la cosa más estúpida que este país ha hecho jamás” por un alto cargo de la Marina. Qian Xuesen, un destacado ingeniero aeronáutico y cofundador del laboratorio JPL de la NASA, fue deportado a China en 1955 acusado de simpatías comunistas durante la caza de brujas.

Qian, recibido como un héroe en su país, se convirtió en el padre del programa espacial y del desarrollo de misiles balísticos de China. Décadas después, una nueva generación de ingenieros chinos ha logrado un récord mundial con una tecnología que busca cumplir una antigua ambición de Qian Xuesen: turbinas eólicas que vuelan como zepelines para aprovechar la energía de los vientos a gran altitud.

Un zepelín anclado a tierra para generar electricidad

El pasado 10 de octubre, en Jingmen, provincia de Hubei, un aerostato de 23 metros de largo se elevó hasta los 500 metros de altura. Este no era un vehículo de transporte, sino el S500, un sistema flotante de energía eólica que comenzó a generar más de 50 kilovatios de potencia a esa altitud.

Con este vuelo, China no solo lanzó un proyecto innovador, sino que estableció dos récords mundiales: el de mayor altitud de vuelo para una turbina de este tipo, superando los 297 metros anteriores, y el de mayor potencia generada, frente a los 30 kW previos.

El concepto, desarrollado por la empresa SAWES en colaboración con la Universidad de Tsinghua y la Academia China de Ciencias, utiliza un dirigible relleno de helio para elevar una turbina eólica a altitudes donde el viento es más fuerte y constante. La electricidad generada se transmite a una estación en tierra a través del cable que ancla la estructura.

Este diseño permite extraer energía del viento de manera más eficiente, ya que la energía disponible es proporcional al cubo de la velocidad del viento. A cientos de metros de altura, los vientos son más rápidos y estables, lo que reduce la intermitencia que afecta a los parques eólicos terrestres. Según los desarrolladores, los recursos eólicos en la estratosfera sobre Xinjiang son 40 veces superiores a los de la superficie.

De situaciones de emergencia a la generación a escala de red

El S500 y su sucesor, el S1000 de 100 kW, fueron desarrollados inicialmente para rescates de emergencia y seguridad urbana. En caso de desastres naturales, el sistema puede desplegarse rápidamente para proporcionar energía y comunicaciones.

Sin embargo, las metas de SAWES van más allá. La compañía ha ensamblado el S1500, diseñado para operar a 1.500 metros de altitud, que generará 1 megavatio. Este modelo busca convertirse en una fuente de energía renovable a gran escala.

Para lograr esta potencia, el S1500 integra un sistema de 12 generadores que operan simultáneamente. La ingeniería de materiales es crucial, utilizando fibra de carbono para reducir el peso y mantener la estructura por debajo de una tonelada.

Al igual que el S500, la energía se convierte en electricidad en el dirigible y se transmite a tierra a través de un cable integrado. SAWES ha atraído inversiones y contratos que superan los 500 millones de yuanes (aproximadamente 64 millones de euros) y ha abierto una planta de ensamblaje en Yueyang.

La historia de Qian Xuesen ilustra las consecuencias imprevistas de la política del miedo. Como relata Los Angeles Times, el hombre que fue clave en el desarrollo del JPL fue deportado a un país con un desarrollo científico inferior, pero logró cambiar esa realidad, y ahora sus herederos están materializando algunas de sus ideas en China.

Imágenes | SAWES

En Xataka | Cómo China se convirtió en una potencia nuclear y espacial de la forma más inesperada: con un alumno del MIT expulsado por EEUU

Fuente original: ver aquí