La Justicia posee chats de autoridades y empleados del Laboratorio Ramallo, productor del fentanilo contaminado, que evidencian la falta de mantenimiento de la planta, violaciones a los protocolos de fabricación y la decisión de falsificar registros.
Uno de los mensajes en poder de los investigadores expresa: “La verdad que es lamentable lo de producción, hasta que no pase algo grave, parece que no van a escarmentar”. Este mensaje proviene de un empleado del Laboratorio Ramallo, escrito en mayo de 2024, siete meses antes de que se distribuyeran los dos lotes de fentanilo adulterado.
Los mensajes forman parte de la causa penal y la fiscal Laura Roteta los incluyó en un dictamen en el que imputó al empresario Ariel García Furfaro, dueño de HLB Pharma, y a sus presuntos cómplices (actualmente detenidos) de un delito que conlleva una pena de hasta 25 años de prisión.
Los investigadores sostienen que hay elementos para sospechar que el Laboratorio Ramallo, que producía para HLB Pharma, también pertenecía al grupo de García Furfaro.
Los chats revelan el descontrol general del laboratorio y mencionan irregularidades específicas en la producción del fentanilo. Un mensaje de un empleado, aparentemente relacionado con el control de calidad, dice: “Hola Wilson, trajeron el fentanilo. Comparando con el producto terminado que teníamos disponible daba 88,9%. 20 minutos después lo trajeron y está en 89,9%”. A lo que le responden: “Para mí algo está fallando en el espectrofotómetro, pensá que nunca se calibró o se le hizo mantenimiento”.
En otro chat, un empleado advierte: “El fentanilo dio mal, hay que repetirlo mañana. Quedan dos ampollas en la heladera, envueltas en aluminio. Necesito que a primera hora 2 analistas distintas hagan el ensayo”. Este mensaje es del 6 de mayo de 2025, cuando ya no podían producir fentanilo porque la Anmat se los había prohibido.
Los mensajes indican que en el laboratorio no se registraban los distintos pasos de la producción como exigen las normas y que posteriormente se inventaban datos. Un superior les indica a trabajadoras del laboratorio, el 12 de diciembre de 2024, que “para la próxima intenten no ser tan repetitivas en las horas y analistas”. Una de las destinatarias responde: “oka empezamos a poner todas horas reales entonces”.
Después de la salida del fentanilo y la intimación de la Anmat por irregularidades detectadas en inspecciones, hay chats que reflejan preocupación por el descontrol: “Escondieron todos los reactivos vencidos así que no tengo para preparar la fase móvil (…) Usted sabía que dejaron todos los reactivos afuera bajo la lluvia? Pudo haber explotado eso tranquilamente”, expresa un empleado.
En otras conversaciones, se menciona la suciedad y la falta de mantenimiento del laboratorio, y que Damián García Furfaro, miembro del directorio de HLB, estaba al tanto de la situación.
Un mensaje indica: “Gente, me llamó recién Damián García diciéndome que hay muchas cosas en planta de agua y sueros en estado deplorable (…) Le dije que eso estaba levantado y que entre viernes y sábado lo vamos a terminar de reparar”.
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