Los chinches son insectos pequeños, planos y de color rojizo que pueden sobrevivir varios meses sin alimentarse y suelen esconderse en lugares inesperados. Sin embargo, hay métodos que pueden erradicarlos por completo.
El calor como solución
El calor se presenta como la estrategia más eficaz para combatir las chinches, que suelen ocultarse en colchones y grietas. Expertos coinciden en que las altas temperaturas son un recurso accesible y directo para reducir su presencia en el hogar, siendo el primer paso en cualquier plan de control.
Identificación de chinches
Las chinches de cama son insectos que se alimentan de sangre humana y animal durante la noche. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), miden entre 1 y 7 milímetros y pueden sobrevivir varios meses sin alimentarse. Aunque no transmiten enfermedades, pueden causar irritación y molestias al dormir.
Sus picaduras pueden no dejar marcas visibles, pero suelen aparecer como áreas rojas y elevadas que generan picazón e irritación. El CDC indica que pueden presentarse en línea recta o en grupos, y en algunos casos pueden provocar reacciones alérgicas.
Cómo funciona el calor contra las chinches
De acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), el calor intenso puede eliminar las chinches en todas sus etapas de vida. Lavar ropa y sábanas con agua muy caliente y secarlas durante al menos 30 minutos a máxima temperatura es una práctica segura y eficaz.
La Universidad de Cornell recomienda tratar los textiles en secadoras a 125 °F (52 °C) durante 20 minutos para eliminar estos insectos en todos sus estadios. Otra opción es aplicar vapor caliente sobre colchones, muebles y zócalos.
Se destaca que no es necesario desechar ropa ni reemplazar la cama, ya que el calor bien aplicado es suficiente para desinfectar. Sin embargo, en algunos casos, puede ser necesario recurrir a tratamientos térmicos profesionales que elevan la temperatura de toda la vivienda a más de 134 °F (57 °C) para una eliminación completa.
Otros métodos y productos aprobados por la EPA
Además del calor, existen alternativas complementarias que ayudan a controlar la plaga en el hogar:
- Aspirar: limpiar todas las superficies, incluidas las uniones de muebles y zócalos, y desechar el contenido de la aspiradora en bolsas plásticas selladas.
- Guardar objetos infestados: colocarlos en bolsas herméticas o contenedores cerrados durante meses.
- Mantener la cama separada de la pared: usar trampas en las patas para impedir que las chinches suban desde el suelo.
- Sellar rendijas y grietas: con silicona o masilla para reducir escondites.
No mover objetos de un cuarto a otro, ya que eso facilita la propagación. También se puede realizar un tratamiento con frío, colocando objetos pequeños en el congelador a 0 °F (-18 °C) durante al menos tres días, utilizando bolsas herméticas. Además, se pueden usar desecantes aprobados por la EPA, como el gel de sílice, que destruyen la capa protectora del insecto.
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