El Gobierno oficializó un aumento en los impuestos a los combustibles mediante el Decreto 617/2025, publicado el viernes en el Boletín Oficial. Este nuevo esquema de actualización de impuestos para combustibles líquidos y el dióxido de carbono comenzará a regir a partir de septiembre.
El documento lleva las firmas del ministro de Economía, Luis Caputo, y del jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Se establece que los montos fijos se actualizarán trimestralmente según las variaciones del Índice de Precios al Consumidor (IPC) proporcionado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
De acuerdo con la Ley 23.966, la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil deberán ajustarse trimestralmente según el IPC. Además, se mencionó que, para estimular el crecimiento económico mediante un sendero fiscal sostenible, se diferirán parcialmente los incrementos correspondientes a 2024 y al primer y segundo trimestres de 2025.
Aumentos específicos por tipo de combustible
El aumento en el gasoil será de $8.577 por litro para el gravamen general, $2.895 para la alícuota diferencial en regiones como la Patagonia, y $0,978 por litro por el gravamen al CO2. En el caso de la nafta, el incremento será de $10.523 por litro en el impuesto sobre combustibles líquidos y de $0,645 por litro en el impuesto al dióxido de carbono.
Segunda fase del aumento
A partir del 1° de octubre de 2025, se aplicará el incremento total acumulado en los impuestos, que incluirá los remanentes de la actualización de 2024 y los del primer y segundo trimestres de 2025.
Esta medida busca fortalecer las cuentas fiscales del gobierno ante la necesidad de responder al paquete de leyes recientemente aprobado por el Congreso.
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