Jacqueline Caminos, de 87 años, contrajo polio en la década de 1950, lo que le dejó una parálisis en los miembros inferiores. A pesar de su discapacidad, ha dedicado su vida a la inclusión laboral de personas con discapacidad (PCD), fundando en 1988 la Fundación Par, que ha ayudado a 2,500 personas a conseguir empleo.
Un camino lleno de desafíos
Jacqueline creció en un entorno privilegiado, pero su vida dio un giro drástico cuando contrajo poliomielitis a los 14 años. A partir de ese momento, su vida se centró en la rehabilitación y la lucha por sus derechos y los de otros en situaciones similares. Fue pionera en el movimiento de autorrepresentación y en la promoción de políticas inclusivas en Argentina.
Impacto de la Fundación Par
Desde su creación, la Fundación Par ha realizado más de 9,000 entrevistas laborales, facilitando que 2,500 PCD obtuvieran empleo y 250 iniciaran sus propios emprendimientos. Además, ha capacitado a 14,000 personas en cursos y talleres y ha asesorado a 16,500 sobre sus derechos. La fundación también ha colaborado con más de 700 empresas en la implementación de políticas inclusivas.
Reflexiones sobre la inclusión
A pesar de los logros, Jacqueline señala que aún persisten el rechazo y el miedo hacia las personas con discapacidad, especialmente en el ámbito laboral. “Se habla más del tema, hay más respeto, menos prejuicios, pero todavía hay que derribar muchas barreras”, afirma.
Un legado de lucha y esperanza
Jacqueline continúa activa, participando en actividades virtuales y apoyando a organizaciones sin fines de lucro. Su sueño es un mundo más justo, donde las personas con discapacidad no tengan que luchar por sus derechos.
Fuente original: ver aquí
