La gelatina es uno de los postres más aceptados en la gastronomía argentina, debido a su bajo costo, es una opción rica para consumir después de cada almuerzo o cena. Si bien existen marcas industrializadas que contienen un alto nivel de conservantes y azúcar, hay una versión casera y saludable que se puede adoptar en el menú diario sin gastar mucho dinero. A continuación, se explica cómo hacerla en pocos minutos.
La gelatina es rica en colágeno, un nutriente necesario para diversas funciones vitales del organismo. Está hecha a base de huesos y cartílagos de animales y tiene un efecto positivo en la salud articular y cardiovascular del cuerpo.
Gelatina sin azúcar ni conservantes, la tendencia saludable para comer de postre
Ingredientes:
- 3 cucharadas de gelatina sin sabor.
- 500 ml de jugo natural (puede ser de la fruta que más te guste).
- Frutas frescas cortadas en trozos (se sugiere las de estación por ser más económicas y que aportan los nutrientes justos según la estación).
- 3 cucharadas de miel o una de estevia.
- 100 ml de agua fría.
Paso a paso:
- En un bowl, hidratar la gelatina sin sabor con agua fría por 10 a 15 minutos.
- Calentar el jugo frutal seleccionado a fuego lento y agregar la gelatina hidratada. Revolver con un batidor para evitar la formación de grumos.
- Cuando esté caliente, agregar las frutas y endulzar.
- Antes de que rompa hervor, retirar del fuego y verter el líquido en un molde. Esperar a que entibie y luego enviar el recipiente a la heladera hasta que solidifique, aproximadamente 3 horas.
Tiempo de cocción: 10 minutos.
Tiempo de preparación total: 3 horas y 30 minutos aproximadamente.
Tips adicionales:
- Si se desea obtener un postre cremoso, utilizar 400 ml de jugo de frutillas y 100 ml de leche. Se obtendrá una combinación similar al flan.
Fuente original: ver aquí