El magistrado Ernesto García Maañón, presidente de la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal de San Isidro, está en el centro de una controversia tras la presentación de capturas de chats que le envió a una secretaria letrada que trabajaba bajo su supervisión. La funcionaria presentó una denuncia por acoso sexual y laboral ante la Subsecretaría de Control Disciplinario de la Suprema Corte de Justicia bonaerense.
Los mensajes, que incluyen comentarios inapropiados y halagos, fueron presentados por el abogado Juan Saucedo, representante de la denunciante, G. B. S., como parte de una ampliación de la denuncia. Los textos abarcan desde el 20 de febrero hasta el 11 de julio, cuando la funcionaria decidió bloquear al magistrado.
En la denuncia, se menciona que García Maañón hizo insinuaciones y comentarios sobre la apariencia de la secretaria, lo que generó un ambiente laboral hostil. La denunciante también relató incidentes de maltrato verbal por parte del juez en su despacho.
La situación se agravó cuando la denunciante reportó haber sido objeto de vigilancia por un extraño cerca de su hogar, lo que llevó a García Maañón a ofrecerle asesoramiento sobre la adquisición de un arma para su protección, lo que fue interpretado como una falta de profesionalismo.
García Maañón presentó su renuncia como magistrado a finales de agosto, y el gobernador Axel Kicillof aún no ha decidido si acepta su dimisión. La Suprema Corte de Justicia bonaerense ha iniciado un sumario administrativo para investigar las denuncias, mientras que también existe una causa penal en curso a cargo del fiscal José Amallo. La denunciante se encuentra actualmente bajo atención médica y psiquiátrica, lo que ha retrasado su declaración en el expediente penal.
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