El costo de las canastas básicas subió un 1,9% en julio, siendo esta la mayor suba desde marzo de este año, cuando las canastas habían registrado un aumento del 5,9% (Alimentaria) y del 4% (Total). La inflación de julio se ubicó también en el 1,9%, lo que representa una aceleración respecto al mes anterior.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la Canasta Básica Total (CBT), que determina la línea de pobreza, y la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que mide el umbral de indigencia, crecieron en la misma proporción. Así, una familia compuesta por dos adultos y dos niños necesitó $1.149.353 para no ser considerada pobre y $515.405 para no ser indigente.
La CBA se determina tomando en cuenta las necesidades nutricionales imprescindibles de un varón adulto de entre 30 y 60 años con actividad moderada. Los alimentos y sus cantidades se seleccionan según los hábitos de consumo de la población, basándose en datos de la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares del INDEC.
Para calcular la CBT, se amplía la CBA mediante un coeficiente que mide la relación entre los gastos alimentarios y los gastos totales observados en la población de referencia.
Con el aumento del dólar a principios de julio, la inflación para ese mes se situó en el 1,9%, lo que significó una aceleración respecto a junio. Con esta cifra, la variación acumulada alcanzó el 17,3%, mientras que la interanual fue del 36,6%, según informó el INDEC.
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